28 de Enero del 2015

Cómo poner un vinilo decorativo. Primera parte

Venimos del anterior artículo donde os hemos enseñado los primeros pasos tras recibir el vinilo decorativo y cómo conservarlo si no  deseamos colocarlo en cuanto nos llegue. Pero ha llegado el día. Vamos a explicaros lo más clara y sencillamente como colocar un vinilo decorativo. Y nos vamos a centrar en un vinilo de gran tamaño, con varias piezas, que son los vinilos más complicados de colocar, aunque no es nada que no podamos hacer, con la ayuda de algún amigo.

¿Cómo se ponen los vinilos decorativos?

Como os decíamos, tenemos el vinilo estirado. No estaría de más volverlo a apretar con la espátula.

¿Para que apretamos el vinilo con la espátula?

Nuestro único objetivo al apretar un vinilo decorativo, es conseguir que todas las partes del vinilo se peguen al papel trasportador, y de esta manera, cuando retiremos el papel protector del adesivo del vinilo, tendremos todas sus piezas pegadas al papel trasportador. 

Lo primero es presentar nuestro vinilo decorativo en el lugar donde hemos decidido colocarlo. Probaremos y elegiremos el lugar más idóneo para nuestro vinilo decorativo, y lo sujetaremos con pequeños trozos de cinta de carrocero. Se trata de una cinta de baja adherencia (para no estropear la pintura) que venden en todas las tiendas de pintura, supermercados, bazares...

Podemos recortar las partes sueltas de nuestro vinilo, para pegarlas por separado. En el ejemplo vemos como ha recortado un pájaro para colocarlo mas lejos del árbol de vinilo, y así ocupar más espacio con el mismo vinilo.

Nada une, en nuestro ejemplo, las ramas del arbol con los pájaros que están volando. Recuerda que no es que tenga el fondo transparente nuestro vinilo decorativo, es que no tiene. 

Como te enseñábamos en el artículo como son los vinilos decorativos, esos trozos sueltos, son vinilos exactamente igual que el grande, con sus tres capas: el propio vinilo, el papel que protege el adhesivo de ese vinilo, y por el otro lado un papel transportador para llevar todas las piezas sueltas del vinilo a la pared, como si fuesen una sola pieza. 

Una vez que tenemos nuestro vinilo decorativo presentado en el lugar en que lo deseamos, lo debemos atravesar por una o varias tiras de cinta de carrocero. En el caso de vinilos grandes como éste, deberían ser varias, ya que tenemos que retirar el resto de trocitos de cinta que sujetaban el vinilo decorativo y debe quedar sujeto únicamente por estas tiras que lo atraviesan.

De esta forma podemos elegir una de las dos partes, en caso de vinilos grandes, la de arriba, y con cuidado separar el papel transportador y el protector. Todo el vinilo debe quedar pegado en nuestro papel transportador, dejando su parte adhesiva hacia el exterior, que luego irá contra la pared.